lunes, 7 de noviembre de 2011

La formalización en la estructura organizacional

La idea de que tanto el individuo como la institución necesitan organizarse y comunicarse, es de gran aceptación. Es importante hacer énfasis en que una organización moderna constituye ante todo una composición social de seres humanos; en donde es preciso que exista una estructura, una jerarquía necesaria para que se logren los fines que la organización se propone.

Por tratarse de seres humanos, el factor esencial de la conducta de una organización es la comunicación en todas sus direcciones y en todos los niveles; a través de los elementos del proceso de comunicación; en el que se distingue a los canales de comunicación; es decir, a la línea de personas a través de las cuales pasan los mensajes; y la utilización de las tecnologías.

El análisis de la comunicación organizacional engloba las prácticas internas y externas de los flujos comunicativos de la organización; en donde se pone énfasis en la necesidad de alcanzar un equilibrio entre los canales formales e informales que se utilicen. Entonces establecemos que los flujos de comunicación se encuentran compuestos por el conjunto de estos canales de comunicación y representa en sí la estructura de la organización desde el punto de vista de las interrelaciones de comunicación; lo cual puede ayudar a elevar la eficiencia del proceso de las comunicaciones; es decir que se logre transmitir efectivamente un mensaje.

La buena comunicación tiene mucha importancia para la eficacia de cualquier organización o grupo y se refiere a la transmisión y comprensión de significados. El hombre es un ser netamente comunicativo, y realiza esta actividad durante todo el día, (escribe, lee, habla, escucha). No puede existir un grupo que no tenga comunicación; es decir, la transmisión de algo con sentido entre los miembros que lo componen.

El flujo de mensajes entre las personas sigue un camino denominado Red de Comunicaciones. La dirección de la red ha sido tradicionalmente dividida en comunicaciones ascendentes, descendientes y horizontales, dependiendo de quien inicia el mensaje y quien lo recibe.

Por proceso seriado se entiende el camino paso a paso que sigue la comunicación dentro de la organización es decir, el proceso persona a persona. Existen y coexisten paralelamente redes formales e informales, por éstas últimas circulan sobre todo rumores e información oficiosa.

La existencia de los sistemas trata de que al darse la comunicación en todas las direcciones se fortalezcan las redes formales, así se tienen bajo control las redes informales.

Así mismo, cuando hablamos de flujos de comunicación, nos referimos a los procesos de comunicación que se llevan a cabo al interior de la organización de acuerdo a la estructura formal (organigrama) y éstos pueden ser de la siguiente manera:

a. Descendente: Teniendo como funciones principales, las de coordinar, informar, motivar y controlar.

b. Ascendente: Dentro de sus funciones se encuentra la de comprobar la recepción del mensaje, evaluar, informar y sugerir.

c. Horizontal: (Hay autores que le llaman lateral). Aquí la función primordial es la de intercambio, coordinación y apoyo entre el personal de la misma posición jerárquica.

Objetivos Globales de la Comunicación Interna


Partiendo de la definición de Comunicación interna antes señalada, podemos establecer

un conjunto de objetivos globales que tendrá este intercambio de información entre los

miembros de una organización:




A Nivel Relacional, lo que se busca es establecer una relación fluida entre


empleados y empleadores, por medio de canales adecuados entre todos los niveles

de la compañía.


A Nivel Operativo, la intención es facilitar la circulación e intercambio de


información entre todos los niveles de la empresa, permitiendo, así, un

funcionamiento más ágil y dinámico de las diferentes áreas, y una mejor

coordinación entre ellas.


A Nivel Motivacional, el objetivo es motivar y dinamizar la labor de los miembros


de la organización, contribuyendo a crear un clima de trabajo agradable, que

redunde en una mejor calidad del trabajo y en la mejora de la productividad y

competitividad de la compañía.


A Nivel Actitudinal, se intenta obtener la aceptación y la integración de los


empleados a la filosofía, a los valores y a los fines globales de la organización. Y

también se busca crear y mantener una imagen favorable de la empresa en los

miembros de la organización.

Sin duda, estos objetivos globales no serán los únicos que se planteen a nivel de

Comunicación Interna, sino que servirán de guía y de marco de referencia a otros

objetivos específicos o particulares, que se podrán establecer en función de las

características de la organización y de la situación en que se encuentre la compañía.